Cambios en la jurisprudencia sobre la valoración de las faltas graves: implicaciones y estrategias para empresas

Dado que en nuestro ordenamiento jurídico la jurisprudencia es una fuente formal de derecho, es crucial estar al tanto de los últimos pronunciamientos de las Altas Cortes. Recientemente, la Corte Suprema de Justicia emitió una sentencia que redefine la valoración de las faltas graves previamente calificadas por el empleador en el contexto de los despidos con justa causa. Este cambio no solo es un punto de inflexión en la jurisprudencia laboral, sino que también tiene implicaciones importantes para las empresas en Colombia. Nuestro objetivo es desglosar este cambio y analizar cómo puede influir en la gestión de recursos humanos y las decisiones legales de las empresas.

Contexto legal

Antes de adentrarnos en los detalles de la reciente sentencia, es esencial entender el marco legal previo relacionado con los despidos con justa causa. En el Código Sustantivo del Trabajo, específicamente en el artículo 62, se estipulan las justas causas para que un empleador pueda terminar el contrato de trabajo sin el pago de indemnización alguna. Ahora bien, de manera particular, en el numeral 6º se determina como  una justa causa la violación por parte del trabajador de cualquier falta grave “calificada como tal en pactos o convenciones colectivas, fallos arbitrales, contratos individuales o reglamentos”.

Históricamente, la jurisprudencia colombiana había sostenido una postura clara en relación con la calificación o no de faltas graves para la configuración de una justa causa. Así, si una falta no estaba expresamente calificada como grave en documentos como el contrato de trabajo, reglamentos internos o convenios colectivos, se dejaba a discreción del juez, ante una reclamación judicial, valorar su gravedad en el contexto de un despido con justa causa. Por el contrario, si la falta ya había sido calificada como grave en cualquiera de los anteriores documentos, el papel del juez se limitaba a constatar la ocurrencia de la falta, sin evaluar su gravedad.

Esta interpretación establecía un marco claro pero rígido, donde la precalificación de las faltas jugaba un papel crucial en los procesos de despido justificado.

Cambio en la jurisprudencia

El cambio significativo en este punto analizado proviene de la sentencia CSJ SL 2857 de 2023 emitida por la Corte Suprema de Justicia. Esta sentencia marca un antes y un después en la forma en que se evalúan las faltas graves en los procesos judiciales en que se debate la configuración o no de un despido con justa causa. En ese sentido, la sentencia mencionada determinó que incluso si una falta ya ha sido calificada como grave en documentos contractuales o reglamentos internos, el juez ahora tiene la facultad de evaluar la gravedad de la falta en el contexto específico en el que ocurrió.

Este cambio representa una evolución importante en la jurisprudencia laboral, ya que otorga a los jueces mayor flexibilidad para considerar las circunstancias únicas de cada caso. La Corte argumenta que esta nueva interpretación es necesaria para proteger a los trabajadores de sanciones desproporcionadas y asegurar que las consecuencias impuestas sean acordes con la gravedad real de la falta cometida.

En resumen, la sentencia recalca la importancia de evaluar cada caso de despido justo de manera integral, considerando no solo la clasificación previa de la falta, sino también el modo, tiempo y lugar en que se cometió.

Implicaciones de la sentencia CSJ SL 2857 de 2023 para las empresas

Este cambio jurisprudencial tiene implicaciones significativas para las empresas en Colombia. En primer lugar, recalca la necesidad de una evaluación más detallada y contextual de las faltas cometidas por los empleados antes de proceder con un despido. Las organizaciones ahora deben considerar no solo la naturaleza de la falta según su clasificación previa, sino también las circunstancias específicas en las que se produjo, los riesgos que se generaron, los antecedentes disciplinarios y los perjuicios causados.

En segundo lugar, este cambio aumenta la importancia de mantener una documentación exhaustiva y detallada sobre las conductas de los empleados y las circunstancias de cualquier incidente. Esto es crucial para respaldar las decisiones de despido ante un posible debate judicial. Además, las empresas deben ser conscientes que incluso si una falta está clasificada como grave en sus reglamentos internos o contratos, el operador judicial podrá entrar a valorar si considera que la misma fue verdaderamente grave y no se limitará a verificar si la conducta se cometió o no, como ocurría con anterioridad.

Estrategias y recomendaciones ante la nueva jurisprudencia

Ante este cambio jurisprudencial, es fundamental que las empresas adopten estrategias proactivas para gestionar eficazmente sus procedimientos de despido. Aquí algunas recomendaciones clave:

• Documentación detallada: Mantener una documentación exhaustiva sobre la conducta de los empleados y cualquier incidente. Esto incluye no solo la falta en sí, sino también el contexto en el que ocurrió, los riesgos que se generaron y especialmente los perjuicios causados.
• Capacitación del personal de RR.HH.: El equipo de recursos humanos debe estar plenamente informado sobre los cambios en la jurisprudencia y capacitado para aplicarlos en sus procesos de toma de decisiones.
• Consultoría legal: El asesoramiento legal especializado como el que ofrecemos en Álvarez Liévano Laserna es vital para evaluar y ajustar sus procesos de despido y gestión de personal, garantizando así el cumplimiento de la nueva normativa.
• Capacitación a los trabajadores: Capacitar a los trabajadores sobre las faltas graves calificadas, la importancia de las mismas para la empresa y las implicaciones de su violación, dejando rastro de tales capacitaciones, será un argumento de defensa adicional para sustentar la gravedad de una conducta.

Al adoptar estas medidas, las empresas no solo se mantendrán al día con los cambios laborales, sino que también fortalecerán sus prácticas de gestión de personal, beneficiando tanto a la organización como a sus empleados.

El reciente cambio en la jurisprudencia respecto a los despidos con justa causa representa un punto crucial en materia legal-laboral colombiana. Este nuevo precedente introduce nuevos retos que deben tomarse como una oportunidad para que las empresas refuercen sus prácticas de gestión de personal. Al mantenerse informadas, revisar sus políticas internas y adoptar un enfoque proactivo pueden no solo cumplir con la ley, sino también fomentar un entorno laboral más justo y equitativo.

En Álvarez Liévano Laserna, estamos comprometidos a ser sus aliados en este proceso, ofreciendo la orientación y el apoyo que su empresa necesita para navegar con éxito en este nuevo paisaje legal.